En Madrid siempre han habitado personajes ilustres, escritores, reyes, héroes, pintores… pero también personas como nuestro vecino del tercero, personas que han formado parte de la historia de Madrid, y que poco o mucho también han cambiado la historia de la ciudad.
Por lo tanto merecen ser recordados.
Hoy vamos a hablar de los madrileños de bronce, personajes con los que seguro te has cruzado alguna vez, y si no es así, desde Cuéntame Madrid te damos la oportunidad de poder conocerlos, ir en su busca y conocer su historia.
JULIA (Calle del Pez, Metro Noviciado)
Si bajas por la calle San Bernardo, hacia Gran Vía, podrás cruzarte con esta misteriosa chica.
Su nombre es Julia y su presencia en esa calle se debe a una leyenda que se extendió rápidamente a mitad del siglo XIX.
En esta época, el acceso a la universidad solo estaba permitido a los hombres, pero la leyenda cuenta, que una chica llamada Julia, asistía a las clases de la Universidad Central, situada en San Bernardo, disfrazada de chico.
La leyenda posiblemente esté basada en Concepción Arenal, quien si hizo esto realmente.
En 2003, Antonio Santín, se inspiró en esta historia para crear “Tras Julia”.
EL BARRENDERO (Plaza Jacinto Benavente)
Seguro que te has cruzado algún día con él, haciendo su trabajo sin hablar con nadie. Es el barrendero de Jacinto Benavente.
La escultura se inauguró en Julio 2001 por el alcalde de aquel momento, Álvarez del Manzano, con la intención de agradecer a este gremio su labor por mantener limpia la ciudad.
Pero la escultura guarda un secreto más. Para realizarla se utilizó como modelo un barrendero de Colmenar Viejo que era amigo del autor. El uniforme con el que aparece vestido es el que lucía este gremio durante los años 60.
Su apariencia es discreta, como el trabajo de esas cientos de personas que cada día se esfuerzan por mantener limpias nuestras calles.
EL VECINO CURIOSO (Calle de la Almudena)
Seguro que cada vez que habéis pasado por la Calle de la Almudena os habéis preguntado quien era este personaje con boina, apoyado en la barandilla. Es nuestro Vecino Curioso.
La estatua está situada sobre la barandilla mientras observa los restos arqueológicos del ábside de la antigua iglesia de la Almudena.
La presencia de esta estatua hace que tanto madrileños como turistas, nos acerquemos a esa misma barandilla y seamos partícipes del descubrimiento de estas ruinas.
El título que le pusieron a la obra es muy apropiado, ya que a todos en algún momento nos puede la curiosidad.
Además dice la leyenda que si le tocas el culo al vecino, te da buena suerte. Quizás por eso que lo tenga tan brillante.